Compartir la experiencia cristiana y reforzar el sentido de familia, algunas claves de los grupos de fe del Movimiento Spínola
Hace unos días, el grupo de Montañeros de Santa María de nuestro colegio vivió la primera acampada del curso. En Aznalcóllar, los alumnos de 3º y 4º de ESO y 1º y 2º de Bachillerato que forman parte de este grupo de fe, tuvieron la oportunidad de disfrutar de lo sencillo, agradecer el regalo de la naturaleza, compartir su experiencia de fe con otros y reforzar el sentido de familia Spínola. Estas vivencias son también algunas de las claves que tienen en común las reuniones y actividades que forman parte del Movimiento Spínola, una línea pastoral de nuestro proyecto educativo que marca la formación y experiencia de los alumnos.
Tanto el grupo de Montañeros (para 3º y 4º ESO y Bachillerato), como el de Patrulleros (1º y 2º ESO) y el Movimiento Infantil Misionero (MIM para 5º y 6º de Primaria), tienen por objetivo ayudar a vivir una experiencia de encuentro personal con el amor de Dios. Son espacios en los que se busca que los alumnos hagan un proceso de crecimiento en la fe, viviendo una experiencia de comunidad.
Desde ahí, todos los grupos de profundización en la fe de nuestros centros, forman parte del Movimiento Spínola, que se inspira y desarrolla a partir del proyecto apostólico que Marcelo Spínola y Celia Méndez quisieron. Esta mística común es lo que da unidad a todos nuestros grupos, dentro de su diversidad.
Los grupos de fe tienen una función importante en los proceso de desarrollo de la persona porque favorecen una buena socialización, ayudan al desarrollo de la personalidad y promueven el diálogo, la cooperación y la corresponsabilidad cristiana. Cada grupo tiene en cuenta la evolución propia de las distintas edades y trabajan la capacitación para la tarea de encontrarse consigo mismo, con los otros y con el mundo.
En la práctica, esto se traduce en reuniones periódicas de grupo fuera del horario escolar, momentos fuertes dentro del grupo y convivencias, marchas y acampadas como la que acaban de vivir los Montañeros de nuestro colegio. También encuentros inter-centros en los que la experiencia incluye a los grupos de fe de todos los colegios Spínola, igual que ocurre en los campamentos y actividades de verano.
En el blog de nuestra Fundación se recogen algunos testimonios de estas convocatorias y todos coinciden en la vivencia inolvidable que supone encontrarse con otros alumnos, de igual a igual, para compartir la fe, vivirla en comunidad y sentir la identificación con el carisma. El Movimiento Spínola es un modo de crecer juntos.
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